Debido a que la zona de los lagos estaba repleta de los animalitos típicos de la zona, los comenzaron a reubicar para que no se sature la zona.
Ya confirmaron, que solo dejaran 10 por ciento de los 1200 ejemplares que se registraron. Las autoridades porteñas explicaron que los llevarán a diferentes parques del conurbano.
Pese a que son un clásico, mas para los niños, pero ya no formarán parte del paisaje.
Las autoridades porteñas ya comenzaron a reubicar a los gansos que súperpoblaron la zona y los distribuirán en diferentes puntos del Gran Buenos Aires.
La reubicación empezó de manera progresiva, explicaron desde el organismo, en referencia a los primeros operativos para trasladarlos del lugar.
“El objetivo de esta iniciativa es brindarles un ambiente más amigable y adecuado a sus necesidades”, argumentaron.
Los vecinos salieron a defender a los bichitos, “no molestan a nadie”, las autoridades subrayaron que la superpoblación afectó al ecosistema de los lagos.
“Se encuentran fuera de su hábitat natural ya que son animales de granja.
Ahora alteran la biodiversidad del espacio y no permiten que otras especies de aves se instalen en la zona, aseveraron desde la agencia al diario.
Los especialistas aclararon que los gansos, que pueden pesar entre seis y diez kilos, tienen un comportamiento muy territorial, invaden los diferentes espacios del parque y consumen todo el alimento disponible.
En especial, porque pueden consumir hasta un kilo de pasto por día por animal.
El organismo a cargo de este proyecto, que depende del Ministerio de Gobierno porteño, señalaron que “la mayoría de las 80 variedades de aves que antes habitaban en el lugar, emigraron porque no pueden convivir con ellos”.
Los ejemplares ya empezaron a ser trasladados a diferentes puntos del conurbano, como por ejemplo la Fundación Naturaleza Viva de Florencio Varela, granjas educativas y los parques del Ceamse.
Sin embargo, la agencia explicó que no hay un plazo determinado y que demorarán “el tiempo necesario”.
¿Qué son los Gansos Comunes?
Estas especies, anidan en las zonas más frescas del norte de Europa y de Asia.
Durante la estación de otoño, se reúnen en bandadas y emigran a países más cálidos, volando en perfecta formación triangular, llegando hasta el sur de China, la India y a las riberas del mar Mediterráneo, tanto en la costa europea como en la africana.
Los machos superan los cuatro kilogramos de peso y los 160 centímetros de envergadura alar, siendo ligeramente más grandes que las hembras.
A parte del tamaño, no se aprecian otras diferencias debidas al sexo. Presentan el dorso de color gris castaño barrado de negro, al igual que las alas, que tienen las partes anteriores de color gris claro.
El pico es anaranjado y las patas rosáceas, algunos ejemplares son casi completamente blancos.
En la época de reproducción las ocas buscan la soledad y la tranquilidad, cada pareja se aísla y construye un voluminoso nido en el suelo y cerca del agua.
La puesta consta de entre 4 y 7 huevos de color blanco, frecuentemente manchados, que son incubados en solitario por la hembra durante unas cuatro semanas.
Los pollos son nidífugos y abandonan el nido a las pocas horas para seguir a sus padres al agua, podrán volar en unos dos meses.
Se alimenta de hierbas y brotes del suelo, y a veces excava buscando raíces y bulbos.
El ganso común es un ave muy inteligente, que defiende duramente su territorio, como un perro guardián.
Se comunica con sus congéneres por medio de muy diversos graznidos.