Carlos Tevez volvió a ser figura con un gol clave y se ilusiona con otra chance en la Copa
Había pedido tiempo Carlos Tevez. Y también minutos en cancha. Lo primero era para que el equipo incorpore la idea de Gustavo Alfaro y lo segundo para poder recuperar algo de su nivel pasado. El nuevo entrenador lo eligió como el emblema de su ciclo y en los primeros partidos le costó al Apache. Pero ya está de vuelta: este viernes ingresó en el segundo tiempo y le cambió la cara al equipo.
Boca perdía 1-0 y jugaba mal. La infantil expulsión de Damián Martínez, es cierto, le facilitó las cosas al elenco visitante. Alfaro mandó en el entretiempo a Emanuel Reynoso por Campuzano y acertó. La segunda modificación fue el ingreso de Tevez por Sebastián Villa. Iban 15 minutos de la segunda parte. Y tan solo 3 minutos tardó Boca en empatar a través de Wanchope Abila. Se plantó cerca del arco de Nereo Fernández el conjunto de Alfaro, con Zárate por izquierda y el Apache flotando detrás de Abila. Desde ahí manejó los hilos de Boca. Y un ratito después puso el 2-1: remate fuerte desde el punto del penal luego de un par de rebotes, para festejar con fuerza y volver a dedicárselo a su hijo Lito.
“La unión del grupo es lo que nos va a sacar adelante en este año bravo. Sabemos que tenemos que trabajar y dejar la vida en la cancha”, soltó Carlos Tevez. Y agregó: “Se nos complicó en el primer tiempo pero en el segundo mejoramos. Tenemos cosas por corregir pero se hablan puertas para adentro”.
Tevez le había marcado el gol la fecha pasada a Defensa y Justicia y volvió a festejar anoche. “Convertir siempre es lindo”, aseguró el delantero, que seguramente será titular el martes contra Jorge Wilstermann de visitante. Y cerró: “Hay que seguir con la misma actitud y meterle cada vez que a uno le toca jugar. Ahora se nos viene el debut en la Copa Libertadores que va a ser difícil. Comenzar en Bolivia no es sencillo. Debemos meter empeño y trabajo para lograr el sueño que todos tenemos”.
Y para coronar la buena noche de Alfaro con las modificaciones, Agustín Almendra, que entró en el final por Zárate, puso el 3-1 definitivo. “La verdad es que los cambios no hicieron muy bien”, señaló el lateral Julio Buffarini.