Más de la mitad de la población tuvo caídas importantes en sus ingresos

La caída de la actividad económica por la cuarentena hizo que una buena parte de la población (el 53%) acusara bajas importantes en sus niveles de ingresos. Esto sucedió en el 44% de los casos, por la falta de trabajo, según una encuesta hecha por la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) junto con la consultora Voices!.

La pérdida importante de ingresos es el aspecto que más impactó en la población, mientras que casi un cuarto de esta muestra (24%) declaró que esto podría llegar a ocurrirle en el futuro. Entre quienes dijeron que perdieron una porción significativa de ingresos, resaltan los encuestados menores de 50 años (57%), es decir, que impactó en mayor medida sobre la Población Económicamente Activa del país (PEA).

Además, cobra mayor intensidad entre quienes tienen nivel de instrucción primario y secundario (53% en promedio versus 46% con niveles educativos superiores).

Otra encuesta, de la consultora Analogías también reflejó un aspecto vinculado al deterioro de los ingresos. Preguntó a la gente, hace algunos días, si tuvo que usar ahorros que tenía guardados, durante la pandemia o si tuvo que pedir dinero prestado. Un 54,8% de la muestra respondió que “si”.

El estudio de UADE/Voices! mostró, por otro lado, que un 44% de la muestra manifestó haber trabajado menos por falta de trabajo. Esto le ocurrió, especialmente a los hombres (48% contra 41% de las mujeres), a los menores de 50 años y a los estratos socioeconómicos altos (48% en ambos casos),.

Por otra parte, 4 de cada 10 entrevistados (42%) declararon no haber podido pagar las cuotas mensuales de ciertos servicios públicos (luz, agua, gas, etc.), situación que prevalece también entre los menores de 50 años (46%), sectores bajos (46% vs. 34% de la clase alta) y en el interior del país (43%, superando por 6 puntos lo declarado en la Ciudad de Buenos Aires). Además, otros 3 de cada 10 argentinos entienden también -es decir, temen- que podrían atravesar esta situación (33%).

Finalmente, 3 de cada 10 personas sondeadas en el trabajo, manifestaron haber tenido dificultades para obtener atención médica en el contexto actual (31%), situación que afectó en mayor medida a las mujeres, a los estratos socioeconómicos más bajos y los residentes del interior del país.

Otro aspecto que surge del estudio es la expectativa de la gente respecto del impacto económico en un futuro respecto de lo que sucederá en otros países. En este sentido, más de la mitad de los encuestados (54%) cree que el impacto en la Argentina será mayor que en el resto del mundo, mientras que casi un cuarto (23%) cree que el impacto será igual y un 15% opina que tal impacto será menor.

“El pesimismo es transversal a todos los sectores de la sociedad y se acentúa más entre los ciudadanos de mayor edad, mayor nivel socioeconómico y mayor nivel educativo”, explicó el informe.

“El coronavirus es un tema que preocupa a la población, tanto por lo que supone en términos sanitarios, como así también por su incidencia sobre la economía del país”, señala Constanza Cilley, directora ejecutiva de Voices!. “En este sentido, el estudio permite ver el impacto de la pandemia sobre la esfera económica de la gente, donde la mitad de la población declara haber perdido una parte importante de sus ingresos”, recuerda.

Directamente vinculado a los ingresos, otro trabajo de Bain & Co mostró cómo se redujo el gasto en las familias, por ejemplo, en la compra de productos básicos de la canasta. El porcentaje de consumidores que compró menos, en el canal off line pasó del 14% en abril al 26% en mayo. Y, en las compras on line, del 9% al 28% en el mismo lapso.

Andrés Cuesta, secretario académico de la UADE, resume sobre los resultados del trabajo elaborado por la entidad: “Para la mayoría de los argentinos la preocupación por la pandemia se centra tanto en la propia salud y la de su entorno como en la economía familiar y personal. Claramente, en los próximos meses, las políticas públicas tendrán el desafío de conciliar en paralelo tanto los aspectos sanitarios como el impacto del COVID-19 sobre la economía”, opinó.