Según los resultados de un estudio presentado hoy por el Enacom, caen en conductas y hábitos peligrosos a la hora de navegar y tienen poca noción respecto del impacto que generan sus interacciones.
“Hacen todo por la red. Aprenden, se entretienen, interactúan, hacen todo a través de pantallas”, afirmó durante la presentación la especialista Roxana Morduchowicz, asesora del organismo, al señalar que 8 de cada 10 usan internet para tareas educativas -especialmente para asignaturas como historia y biología- y para intereses personales, como música, deporte y series.
Sin embargo, 9 de cada 10 tienen como principal fuente de información a las redes sociales, por lo que se informan por lo que dicen sus contactos -casi sin cuestionarlos-, y cuando realizan búsquedas, el 50 por ciento no distingue contenidos publicitarios de noticias.
“Si no aparece con otra letra o recuadrado, no me doy cuenta de que es una publicidad”, afirmó uno de los chicos encuestados, citado en el estudio presentado hoy en la sede del Enacom.
En esta línea, a la hora de recolectar información para hacer una tarea, 8 de 10 elige la primera página web que aparece en el buscador, sin analizar la procedencia de los datos ni quién es el autor.