Cuál es el peligro real de contagiarse de coronavirus con una pelotita de tenis

Se escucha una risa del otro lado del teléfono. «No, por favor, no hay peligro alguno prácticamente con una pelotita de tenis. De 0 a 100 por ciento, la posibilidad de contagio de coronavirus ​es menos del 1, más bien cercano a 0«. Desde la Universidad de Guanajuato, en México, donde es profesor de Microbiología, el infectólogo Alejandro Macías afirma que «la pelota de tenis tiene un riesgo casi nulo porque se trata de una superficie porosa, rugosa, donde el virus vive muy pocas horas y las que vive no tiene potencia, carece de carga viral».

Días atrás, el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollán, se había referido a que es una incógnita «la liberación de los deportes individuales». El funcionario aseguró que el tenis​ no podría regresar en el Area Metropolitana de Buenos Aires «debido al riesgo de contagio que genera» y remarcó que es la pelota «la gran concentradora del virus».

«Los tenistas suelen limpiar su transpiración con sus brazos y manos -apuntó Gollán-. Al frotarlas sobre sus rostros y luego tomar la pelota, la misma puede llegar a concentrar gran carga viral. Todo jugador de tenis se seca la nariz con la mano, toca la pelota y después va al otro jugador. Es instintivo por la transpiración, y esa pelota llega toda manoseada al otro tenista y a los chicos alcanza pelotas”, aseguró.

Recibido en la Universidad de California, Macías -que vivió en la Argentina durante el brote de la Gripe A- habla de «lógica y de sentido común». «El tenis se juega por lo general al aire libre, lo que el riesgo de pescar el virus es menor, pero si encima hablamos de un objeto inanimado como es una pelotita, no hay prácticamente probabilidades de que por jugar al tenis alguien se pesque coronavirus».

Con una experiencia de casi cuarenta años como infectólogo, Macías explica que el único problema de jugar al tenis sería sociabilizar después de un partido, o que se juegue con público, «y en esa instancia quienes correrían riesgo sería la gente no los jugadores. Meter miedo sin fundamentos, hablar con autoridad porque nadie los rebatirá es una costumbre de los políticas. Aquí en México han pasado cosas similares, pero los clubes abrieron y se juega al tenis sin problemas».

A Macías también le resulta «absurdo» que el protocolo presentado por la Asociación Argentina de Tenis, la pelota tenga una marca que identifique a su dueño. «Es absolutamente innecesario, no sucederá nada si el jugador toma con sus manos la pelotita del rival. Insisto en que se trata de un material inanimado, rugoso, donde el virus es sumamente indefenso».

Por su parte, Agustín Calleri, el presidente de la Asociación Argentina de Tenis señaló que «la situación no da para más. Más de 130 días que los profesores no pueden trabajar, que los clubes tienen sus puertas cerradas, que la industria del tenis está parada totalmente. Nosotros el 25 de abril presentamos el protocolo de manera oficial al Ministro Lammens​ y al Ministro de Salud de la Nación, y desde entonces se juega al tenis de manera segura en 20 provincias».

Médico infectólogo y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), Lautaro De Vedia prefiere no entrar en ninguna controversia con el ministro Daniel Gollán ni verse involucrado en una cuestión política pero cree que «el riesgo es muy menor, creo que hablar de peligrosidad de contagio es ir demasiado lejos, no hay necesidad».

Medido en sus palabras, diplomático, De Vedia, que trabaja en el Hospital Muñiz, sostiene que «el uso del alcohol en gel en las manos sería suficiente para poder jugar al tenis tranquilo, sin público ni un evento social posterior a la práctica del deporte. Sobre los dichos de Gollán, el profesional siente que «en la teoría podría llegar a admitirse lo que dice, pero en la práctica es muy difícil, pero muy difícil, Creo que sus palabras fueron rebuscadas«, sonríe austero.

Cree De Vedia es que un período para bajar los decibles, no entrar en cruces sin sentido «y tampoco asustar ni generar miedo. Sería realmente muy llamativo que se diera un contagio por la práctica de tenis, o de golf… Se tendrían que dar una serie de coincidencias extraordinarias. ¿Por qué se pronuncian estas declaraciones? Creo que tiene que ver con una preocupación por el posible desborde del sistema de salud, no encuentro otra explicación».

El epidemiólogo Mario Borini, también sonríe cuando se le refrescan las palabras de Daniel Gollán. «Creo que ni ellos mismos lo pueden creer. En insostenible, creo que más absurdo que lo de los runners. Las chances de que alguien se contagie por una pelotita de tenis es la misma que tirar una moneda al aire y que caiga parada«.

Profesor de la UBA, y con muchos años en la profesión, Borini intenta llevar lógica «a los dichos inverosímiles del ministro. La pelota pica en el suelo, imaginate que al virus no le hace gracia llenarse de polvo, luego el impacto de la raqueta… ¿cómo reacciona el virus, que encima estaría sobre un elemento inanimado? ¿Qué carga viral puede tener? Creo que forma parte de un discurso que busca transmitir miedo, sucede que ahora ese discurso está quebrado y tiene menos consenso».

Para Borini «hay muchas contradicciones en la mesa de expertos que asesora al presidente porque hay un grave conflicto de intereses que tienen que ver con el financiamiento de distintos laboratorios. Se hicieron muchas locuras, lo que Ginés (González García, Ministro de Salud de la Nación) dijo sobre los runners, esto de que se prohibía la actividad por una cuestión de imagen es una falacia de apelación a la piedad, es decir algo absolutamente engañoso».

«¿De 1 a 100, qué porcentaje de contagio? Uno, y es mucho«, calcula risueño Ricardo Teijeiro, infectólogo que ejerce hace 40 años en el Hospital Pirovano. «La verdad es que no hay razones, no hay evidencia científica que determine que la pelotita de tenis podría ser un factor de contagio».

No encuentra respuestas Teijeiro al porqué de las palabras del ministro de Salud bonaerense. «No sé el motivo, no sé si es porque tiene miedo del colapso sanitario o porque quiere meter miedo… Es cierto que la situación de la provincia de Buenos Aires, por la circulación de millones de personas, es preocupante, pero de ahí a referirse a la pelotita de tenis como vector del virus es otra cosa».

Teijeiro habla de ciencia ficción, de una novela de Ray Bradbury para que se diera un contagio jugando al tenis, «Se tiene que encadenar una serie de situaciones muy complejas: primero que el jugador si está contagiado es asintomático, por lo tanto su carga viral es muy baja. Segundo la pelotita tiene que transportar el virus, ya débil, hacia el otro lado de la cancha y el otro jugador, después de agarrar la pelotita, debe pasarse su mano por el rostro. Es como mucho, ¿no?».