En distintos países se ha implementado, con resultados altamente positivos, la colocación de alcoholímetros en bares y boliches bailables con el objetivo de evitar que que los conductores regresen a sus hogares alcoholizados. Si bien en Argentina este tipo de iniciativas están aún en estudio, un encuesta nacional reveló cómo reaccionarían los argentinos ante los controles voluntarios en lugares críticos.
El Observatorio Vial de la CECAITRA (Cámara que nuclea a las empresas productoras de software vial) realizó un sondeo en más de 1.500 hogares de la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
El 84% de los consultados indicó estar muy o bastante de acuerdo con la idea de instalar alcoholímetros en bares, restaurantes y locales bailables y el porcentaje fue mayor (87%) cuando se les consultó a quienes no conducían ningún tipo de vehículo. Es resto dijo estar poco o nada de acuerdo con la posible implementación de la medida.
Sin embargo, cuando se quiso saber cómo reaccionarían los conductores si se los invitase a realizarse un control en forma voluntaria en algún bar, restaurante o local bailable, el 77% dijo que pensaba que la mayoría de los conductores no se haría el control y sólo el 17% indicó que si.
Tomando en cuenta la edad de los consultados, hubo una pequeña diferencia. Mientras que el 72% de los jóvenes de 16 a 29 años se mostraron muy de acuerdo con la instalación de instrumentos de medición de la alcoholemia, el porcentaje disminuyó a 61% en los mayores de 65 años.
Sin embargo, cuando se quiso saber cómo reaccionarían los conductores si se los invitase a realizarse un control en forma voluntaria en algún bar, restaurante o local bailable, el 77% dijo que pensaba que la mayoría de los conductores no se haría el control y sólo el 17% indicó que si.
Tomando en cuenta la edad de los consultados, hubo una pequeña diferencia. Mientras que el 72% de los jóvenes de 16 a 29 años se mostraron muy de acuerdo con la instalación de instrumentos de medición de la alcoholemia, el porcentaje disminuyó a 61% en los mayores de 65 años.
En la Argentina, según la legislación, la tolerancia de alcohol en sangre es 0,5 m/l para automovilistas y 0,2 m/l para motociclistas y 0 m/l para transportes de cargas y pasajeros.
“Conducir excediendo los límites de alcohol permitidos es una de las mayores imprudencias que se pueden cometer. Debemos ser conscientes de la necesidad de estar 100% lúcidos al volante. Con conductores responsables podremos lograr un tránsito sin siniestros que lamentar”, finalizó Jaime.